El expansionismo de los Estados Unidos por los diversos territorios como Nuevo México, California y Nuevo México estaban camuflados bajo la excusa de la protección de sus intereses en estas regiones.
La forma de actuar de Washington se repitió con la proclamación en 1836 de la República de Texas y la anexión simple y pura en 1845 de Nuevo México, las tropas yanquis aprovechando una coyuntura de inestabilidad política y social invadieron la República de México.
En el año de 1845 después de la ruptura de las relaciones diplomáticas y la anexión de Nuevo México, el gobierno estadounidense insistió en reclamar los territorios encontrados al norte del río Bravo.
En abril de 1846 ante la negativa de México, ordenó su ocupación y ahí fue donde se produjeron los primeros enfrentamientos militares.
En Mayo de 1846 se declara oficial la guerra y los mexicanos perdieron prácticamente todas las batallas. Winfield Scott al mando de la marina, bombardeó y desembarcó en el puerto de Veracruz donde tomó la ciudad el 29 de Marzo de 1847, el general Zachary Taylor penetró por el norte del país y el coronel Stephen Kearny tomó California y Nuevo México.