Si estudiamos la historia de México en forma desapasionada, imparcial, objetiva, quedamos sorprendidos al comprobar que, antes de hacerlo, estuvimos profundamente influenciados por una cantidad enorme de prejuicios, que nos impedían juzgar a los hombres y sus hechos con equidad, con honestidad, con verdadera justicia.

 

Lo común es que nuestros juicios sean unilaterales, parciales y justos. Y la mayoría de las veces, quienes escribieron la historia, lo hicieron movidos por la pasión o por el interés. Y el daño que causan es irreparable, porque toman opinión pública errada e imposible de corregir después, ya que la inmensa mayoría de las personas solo saben de la historia lo que aprendieron a través de fábulas y leyendas tendenciosas.

 

El hombre debe ser juzgado a través de sus hechos y con más razón si es un gobernante. Y los hechos deben ser justamente valorados si hemos de ser justos.

 

Algunas veces, al tratar sobre los gobernantes de México, dijimos que era curioso comprobar que entre los mejores se encontraban los señores Virreyes, (con las naturales excepciones) quienes fueron inclusive mejores gobernantes que los monarcas que los enviaron. De los 62 Virreyes que gobernaron durante el México Colonial, hemos escogido 12 que, de una y otra manera fueron considerados entre los mejores gobernantes de la Nueva España.

 

Consideramos de justicia hacer resaltar las figuras de quienes tuvieron como denominador común una honestidad intachable, un alto sentido del deber, una clara visión de la justicia y una alta calidad humana que los hizo convertirse en protectores de los indígenas envilecidos, vejados, escarnecidos. Estos hombres buenos hubieron de luchar contra poderosas influencias pero, nobles y caballeros, supieron ser superiores en su época.

 

Don Antonio de Mendoza

Don Antonio de Mendoza fue Conde de Tendilla y Comendador de la Orden de Santiago. Fue el primer Virrey de México. Gobernó de 1535 a 1550.

 

Introdujo la imprenta; creó el Colegio Imperial de Tlatelolco; fundó la Casa de Moneda; propuso la Creación de la Universidad; fundó la ciudad de Valladolid; apoyó decididamente al protector de los indígenas fray Bartolomé de las Casas; dictó leyes benéficas para los indígenas; obtuvo para la Ciudad de México, en 1549, el título de Muy Noble, Leal e Insigne.

 

La Colonia progresó bajo su mandato. Fue un gran gobernante que supo actuar con inteligencia, bondad y firmeza. Gozó de gran prestigio entre los indígenas. Murió en Lima en el año de 1552 siendo Virrey del Perú.